Me quedaré soltera (y no será mal plan) (Y es mentira, lo del plan)

Hoy pública ElDiario.es un artículo (¿propagandístico?) sobre un libro que, parece ser (ni siquiera he leído el artículo), habla de las bonanzas de quedarse soltera, en femenino.

Pero yo voy a llevar el tema más lejos, mucho más lejos, para vergüenza de esta sociedad que hemos construido y permitido.

El cuidado de los ancianos, tradicionalmente, se había asignado, sin preguntar, a las mujeres y es injusto, actualmente. Quizás en el pasado, por la división de trabajos, la mujer era la que mejor podía compaginar sus otros trabajos con el de cuidado de los ancianos de la familia. Pero no ahora.

Lo grave del asunto es que el anciano estaba obligado a tener familia descendiente si pretendía tener los cuidados que iba a requerir con la edad. ¿Y si no tenía descendientes ni familiares? Ya nos podemos imaginar, con las bellas personas que hay por el mundo lo que le iba a pasar a nuestro ancianito/a: le iban a chupar hasta la última gota de sangre para después dejarlo morir boca abajo. Porque un anciano llega un punto en que no puede valerse por sí mismo ni puede defenderse.

Es lo mismo que el cuidado de un niño: no puede dejarse a su suerte, porque tampoco puede valerse por sí mismo.

Entonces, ¿por qué el estado se cuida de los menores y no de los ancianos? Porque el niño formará parte de la sociedad y el anciano no. El anciano no va a poder reclamar nada.

Y esto es el "desarrollo" personal que nos espera a todos los que no tengamos descendencia: morir boca abajo.

Y esta es la sociedad que hemos construido y estamos permitiendo.

Reservar un coche de alquiler no sirve para nada

Quien haya tenido que alquilar un coche con poco tiempo se habrá dado cuenta de la facilidad con la que las empresas de alquiler, después de hacer la reserva, te informan de que no tienen coches.

Y entonces a uno le asalta la pregunta: ¿para qué sirve entonces la reserva?
Pues sólo le sirve a la compañía de alquiler para saber qué tiene un cliente que necesita un coche.
No significa que la compañía tenga un coche disponible.

Y todo esto se agrava si la reserva es por Internet: la mayoría de webs son un refrito de las ofertas de otras compañías y se olvidan de cosas tan básicas como que te dé igual el lugar de recogida siempre que esté en la misma ciudad, o por ejemplo que no dispongas de una tarjeta de crédito, aunque sí de débito.
Y suceden cosas como que te avisan de la necesidad de una tarjeta de crédito después de hacer la reserva y haber pagado.
O que tengas que buscar la disponibilidad de un vehículo en cada uno de los lugares de recogida.

Yo solo quería un coche con cuatro ruedas, cambio manual y recogerlo en mi ciudad: ¿es tan complicado?

Vueling: esa empresa tan desastrosa

Que Vueling es un desastre es notorio.

No solo tienen teléfonos 902 para la "Atención al cliente", teléfono de tarificación especial, sino que además gestionan como el culo el correo electrónico.

Hace años que recibo SPAM de Vueling. Sí, SPAM. Nunca le indiqué a Vueling que podían inundarme el correo con mensajes de ofertar, promociones y otras mierdas que no me interesan, pero Vueling sigue enviándomelas a pares.

Y lo mejor de todo es que en cada uno de esos correos de SPAM hay un enlace para dejar de recibirlos. Introduces tu dirección de correo y te contestan este mensaje de chufla:

"El email introducido ya ha sido dado de baja de la newsletter con anterioridad."

Toma ya gestión competente.

Si son incapaces de gestionar una cosa tan sencilla, imagina cómo es el resto del trato que te van a dar.

Pero no me importa, de verdad: cada vez que veo un correo de SPAM de Vueling recuerdo dónde no compraré mi próximo billete. Gracias, Vueling.

Las vírgenes también estudian

La publicidad de los centros de enseñanza, y sobretodo las universidades, parecen dirigidos a imbéciles.

Blanquerna no es una excepción: una joven muy joven, con pelo liso, a la moda pija, medio perfil, con ojos grandes y la mirada ligeramente hacia el infinito y hacia arriba, como las vírgenes.

Y la pregunta es ¿qué tiene que ver esa joven con cualquier cosa que se pueda aprender en Blanquerna? Nada; sólo es un estereotipo sin ninguna relación. Es la imagen de la "chica guay que estudia".

En eso consiste la educación actual.

En efecto, señor ministro: es lamentable

El ministro de Interior Jorge Fernández Diaz ha dicho que "Es lamentable la revelación de procesos judiciales" en referencia a la publicación de los mensajes de los reyes de España, cuando se levantó el secreto del mismo hace semanas.

Seguro que el señor ministro preferiría que viviéramos en la inopia, para poder hacer y deshacer a su antojo, ¿como en los viejos tiempos?
Hay que ver qué difícil es terminar con los malos vicios.

Jorge Fernández Diaz es el mismo ministro que justifica las concertinas, las devoluciones de inmigrantes "en caliente" y el que nos deleitó hace tan poco con ideas conspiranoicas contra el Partido Popular con la misma gracia y salero que el ministro de Hacienda fue capaz de subir el IVA sin nombrarlo.

Tiene usted razón señor ministro: es lamentable. Pero no la noticia, sino su hacer y decir.

Es lamentable tener un ministro como usted. Hoy tiene usted todo mi apoyo: es absolutamente lamentable.

Pero no se preocupe: bese el escultura de cualquier virgen santa, pelillos a la mar y verá qué conciencia más limpia le queda.

Eso sí, ahí queda la información escrita para vergüenza de su memoria.

Acertijos gilipollas

Pues sí: siempre hay alguien que aparece con una acertijo cuya pregunta es insuficiente para contestar. Como este, de El País.

Y los listillos no sólo intentando contestar si no además explicándolo, como cuando Twin Peaks.

Qué pereza me da escribir más de estas tonterías Asumidlo: son tonterías, para tontos con tiempo libre y ansias de demostrar lo "listos" que son.

Si quieres cosas interesantes y sorprendentes mira el canal Numberphile de YoyTube.

Caraduras de campeonato: los diputados

Trabajas cuatro años y tienes derecho a uno de paro: no más ni menos.
Pero la relación entre El Congreso y sus señorías no es laboral (¡ya se ve, ya!) y está regulada por otras normas que distan mucho de ser equiparables a las que tenemos el resto de ciudadanos.

Pero los señores diputados quieren más. Siempre quieren más. El descojono de los sinvergüenzas en El Congreso no tiene limite. Ni estratosférico. Algo que jamás he visto.

Sus señorías, después de su excelente trabajo en El Congreso y de que sus respectivos partidos se hayan estrellado (no hace falta ser muy listo para saber mayoritariamente el partido de esos diputados que no han obtenido un escaño) piden una indemnización porque no encuentran trabajo.

Señorías, espabilen, como el resto de ciudadanos. La sopa boba se ha terminado: a currar, caraduras.

A Pedro Sánchez le cuesta ver las cosas

En efecto, y da fé de ello ElDiario.es: Pedro Sánchez reconoce que el PSOE no tiene "fuerza suficiente" para "un Gobierno monocolor"

Desde las últimas elecciones no se ha dado cuenta hasta ahora. Qué lastimica. No da para más.

Obviedades periodísticas

ElDiario.es nos informa de lo que ya sabíamos antes de las últimas elecciones, incluso antes de las anteriores: El acuerdo PSOE-Ciudadanos aleja a Pedro Sánchez de la izquierda y le empuja a sentarse con el PP.

Pero que el PSOE tiene hace tiempo, como poco desde Zapatero, tics hacia la derecha que le han acabado por hacer girar y girar, mareando a sus votantes, pero con una dirección en su vals particular que tiene un claro sentido a la derecha, pero sobretodo a tomar a los ciudadanos por imbéciles, como han hecho también en el Partido Popular, y por eso tenemos uno de los hemiciclos más coloridos de nuestra historia contemporánea.

Y a pesar de todo eso, pudimos ver cómo a la llamada de un periodista de la Sexta, Pedro Sánchez se acercaba sobrado, tras meterse las manos en los bolsillos: más sobrado aún que de costumbre.
El peor resultado de su historia y va sobrado, lo que nos da una idea de lo poco consciente que es de la situación siendo tan sencilla como es.

Pero es muy probable que llegue a pactar con el Partido Popular, lo que les llevará a ambos a la ruina ideológica y a que tengamos durante cuatro años más a una panda de sinvergüenzas, esta vez a cara descubierta, gobernando el país para sus intereses.

Y échalos, con la ley electoral de chufla que tenemos, con la que básicamente sólo puedes meter un papelito en una urna cada cuatro años para que el que gobierne haga lo que le salga del pito.

El secuestro de la cultura (segunda parte): Nefertiti

Lo sé, lo sé: ¿dónde está la primera parte? Está en proceso de redacción porque es larga y muy jugosa.

Pero mientras tanto podemos hablar de esta otra informacion: el busto de Nefertiti escaneado en 3D y de facto en dominio público.

Que para poder disfrutar y admirar el busto de Nefertiti haya que ir físicamente a un museo ya es una pena. Pero más lo es que, teniendo medios para acercar ese legado cultural a cualquiera que le interese, se secuestre en un museo y se pongan todo tipo de trabas a la difusión de la cultura.

Mientras tanto podemos disfrutar del busto de Nefertiti gracias al acto liberador de alguien que filtró al público el escaneado 3D. Porque la cultura de dominio público no debe tener barreras ni admitir secuestros.

Y de museos y secuestros va la primera parte de este texto. Concretamente de la cara dura y desfachatez de uno de los más grandes de España.

¿Dónde están los imbéciles?

Vamos a ver. A mí me gustaría saber dónde están los imbéciles acientificos y besa pies de bronce que opinaban sobre el cambio climático. ¿Dónde están?

Mientras tanto, en El Congreso…

Los desahucios continúan, la corrupción continúa, el paro sigue por las nubes, pero Andrea Levi y Ramón Espinar aún tienen tiempo para tontear y haces chascarrillos con Pablo Iglesias como apuntador o alcahuete y ofrecedor de despachos publicos para encuentros íntimos.

Es lo que me faltaba por ver en El Congreso: verlo convertido el atril para imbecilidades.

¿PODEMOS ponernos ya de una vez al tajo señorías? Gracias.

¿Qué versión de Microsoft Office utilizas? Ni puñetera idea.

Desde que Microsoft decidió meter en la trituradora los menús y sacar como resultado eso que llaman "ribbons", no hay quien encuentre nada: un bofetón a la usabilidad que merece otro de vuelta a Microsoft.

Cuando los de Microsoft se proponen hacerlo mal, no hay quien les gane.

Con lo fácil que era ir al menú "Ayuda" y luego a "Acerca de…".

Pandeteta, pandereta: un desnudo es noticia

Leo una noticia en ElDiario.es y lo que me llama más la atención es que haya salido en televisión una fotografía de una mujer desnuda en la playa, sea quien sea.

¿Y qué televisión es? Televisión Española. Qué poco sorprendente. Y lo mejor es que las noticias "de calidad" de TVE las pagamos entre todos. En otras palabras le estamos pagando los gastos de su vida a "profesionales" de este nivelazo.

Televisión pública, independiente y de calidad ya.

"¡Alarma! ¡Alarma! ¡Tu banco no es seguro!" y otras gilipolleces

Informar no es sencillo, sobretodo si no sabes del tema de antemano. Y en eso han caído de bruces en ElDiario.es con su artículo "Tu contraseña de banca online no es tan segura como te han dicho".

Está el periodismo, la prensa amarilla, el periodismo malo y esto, que no se puede llamar ni periodismo.

La clave para entender lo pésimo que es el artículo es, ¿cuántas veces te permite tu banco introducir una contraseña incorrecta antes de bloquear tu usuario?

Después de leer el texto de El Diario, no lo voy a llamar artículo ni noticia, parece que 5.000 combinaciones no es nada y sobretodo una cifra muy baja, poco segura.

Sin embargo, tu banco bloqueará tu acceso a la tercera vez que introduzcas una contraseña incorrecta y tendrás que acudir a una oficina del banco o usar la banca telefónica para poder acceder de nuevo a través de Internet.

De hecho, el PIN de tu tarjeta de crédito o débito tiene sólo cuatro dígitos y es bien segura por la misma razón: al tercer intento se bloquea la tarjeta.

Pero aún hay más información que deja en evidencia lo malo que es el texto de ese periódico: la mayoría de bancos además te  proporcionan una tarjeta de coordenadas para hacer una segunda verificación de seguridad cuando realices una operación online.

Y todavía más: bancos como Bankinter, tras introducir una de las coordenadas que el banco te pide, te piden además un código que te envían a tu móvil. Lo que se llama "verificación en dos pasos": no sólo necesitas tu contraseña sino además poseer un "token", un testigo físico (tu móvil) que sólo deberías tener tú.

Pero estos datos esenciales no aparecen en el texto de ElDiario.es.

Si este es el rigor que tienen en ese periódico, cuando puedo contrastarlo con información que ya conozco, ¿cómo voy a confiar en él para informarme de temas que no conozco?

Hay que fastidiarse con la calidad del periodismo.

Y así es como se cumplen las leyes españolas

Domingo Neira García, facultad de Ciencias de la Educación, profesor de Didáctica y Profesión Docente, dijo que la homosexualidad es "una alteración congénita o vicio".

Ese "señor" no tiene ni puta idea de lo que es la OMS, y el fiscal del estado rascándose el ombligo. Ole con ole y olé.

Por qué un Google Nexus 5x no es una buena compra

Todos podemos consultar las características técnicas del Google Nexus 5x, pero lo que sigue es ni experiencia con él y por qué no lo volvería a comprar.

Es el primer móvil al que rompo el cristal de la pantalla. Y no es casualidad que sea el de pantalla más grande que he tenido.

Cuando mi iPhone 3GS dejó de ser utilizable después de una actualización de Apple y lo cambié por un Samsung Galaxy S2 creí que la pantalla era demasiado grande, pero me equivocaba: es un tamaño muy práctico. Puedes tenerlo en el bolsillo delantero y sentarte.

Cuando cambié del Samsung Galaxy S2 al Galaxy S5 creí que una pantalla un poco más grande me vendría bien. Me equivoqué: es el tamaño límite para poder usarlo con una mano y es molesto en el bolsillo, aunque te puedes sentar aún con él.
Samsung incluyó una opción para poder usarlo mejor con una mano, pero no es práctica. Lo que sí agradecí fue el lector de huellas dactilares que me evitó tener que introducir la contraseña para cualquier cosa.

Cuando cambié del Samsung Galaxy S5 (y no vuelvo a comprar ningún dispositivo más de Samsung) al Google Nexus 5x no esperaba una experiencia tan mala. ¿Sabes lo que es que se atasque? Pues se atasca. ¿Sabes lo que es que el reproductor de música se detenga sin ninguna razón ni error? Pues también lo hace. Que no funcionen bien cosas tan básicas es imperdonable.

Para colmo, un día vi que tenía la pantalla con una fina línea que la cruzaba de lado a lado, sin tener constancia de haberle dado ningún golpe o haberlo forzado.
La reparación son 130 euros, sólo la hace LG y tardan una semanaza, durante la cual te vas a tener que comunicar con señales de humo, el que sale de tu cabeza por el cabreo.

Y con esa grieta, arriésgate a llevarlo en el bolsillo.

Solución: un móvil sencillo, un AndroidOne de bq.
El tamaño de la pantalla es suficiente, tiene para dos tarjetas SIM, tiene ranura par microSD (el Nexus 5x no), lo puedes llevar alegremente en el bolsillo, sentarte y no se atasca.

Para mayor vergüenza del Google Nexus 5x, la luz de notificación se enciende, y no exagero, un breve momento cada 5 segundos. Así, si quieres saber "rápidamente" si tienes algo nuevo en el móvil, tienes que quedarte pasmado un rato mirando el móvil, como si fueses idiota, mientras que el bq la enciende al menos una vez por segundo.: gracias bq por el sentido común.

No tiene lector de huellas, pero el resto es correcto y funcional.

Adiós, novedades. Adiós. A partir de ahora que las "maravillas de la técnica" las prueben otros y yo me voy a lo seguro y probado.

Desde mi AndroidOne de bq y su "pantallita" de 4,5 pulgadas.

Móviles, Apps, actualizaciones, obsolescencia programada, la incoherencia de todo junto y su puta madre.

Te compraste un móvil. Barato no sería si quieres que sea mínimamente rápido, que no parezca un huevo hortera, sin colores para daltónicos y que la batería le dure al menos un día.

Pasa el tiempo y si no se le ha roto la pantalla, recibes una actualización del sistema operativo. Las Apps se van actualizando solas.

En el caso de Samsung no recibirás ninguna más: es "su política". Y te la hacen llegar muchos meses después de que Google ya la haya enviado una a sus Nexus. Esto es consecuencia de la "adaptación" que Samsung hace al Android pelado de Google, donde aprovecha para meterte todo tipo de Apps que no vas a utilizar jamás y tampoco podrás quitar.

Y las actualizaciones de Google no son muy distintas: no garantiza que actualicen el sistema operativo (Android) tras 18 meses.

Eso sí, te amedrentan con lo peligrosísimo que es ir por ahí felizmente sin el móvil actualizado, como si de ti dependiera, cuando la cruda realidad es que el fábricante te ha abandonado a tu suerte. Una vez tienen tu dinero, poco les importa el producto que te han encalomado.

¿Te compras entonces otro móvil o los mandas a todos a la mierda?  A puntito estoy de esto último.

Todo esto es consecuencia de lo mal montado que está el tema de las actualizaciones de software.

Pero eso sí: un cargador universal con USB. Tiramos los teléfonos a pares pero nos sirve el mismo cargador. Muy ecológico, sí. Y la Unión Europea en la parra, como de costumbre.

Y quien me diga que cualquier teléfono móvil actual no puede actualizarse, risame da.
La realidad es que cualquier teléfono terminará por no funcionar correctamente si no para de engordar el sistema operativo con nuevas funciones y florituras que yo no he pedido pero el fábricante se empeña en meter.

Vamos a ver: ¿son tan incompetentes o nos toman por gilipollas como para que el primer Nexus o un iPhone 3G no pueda hacer una puñetera llamada sin poner en riesgo al usuario por los boquetes de seguridad? ¿Tan complicado es? No lo es. De verdad. Sólo hay que querer.

Pero a los fabricantes no les interesa. Lo que les interesa es que te compres un móvil cada dos años, lo necesites o no.

"Es que dejan de funcionar las aplicaciones". Claro, si no paran de cambiar el entorno en que deben funcionar éstas, es normal que dejen de funcionar. 
Y esta es otra lacra: los programadores de Apps tienen que modificar sus creaciones para que sigan funcionando después de que el fabricante del sistema operativo haya cambiado lo que le haya dado la gana.
Microsoft es un ejemplo de esto en cada versión de Windows, a pesar de cierta voluntad de hacer que las aplicaciones existentes funcionen en la nueva versión.
Google aún no ha aprendido esta lección.
Apple es la que lo lleva mejor, pero sólo en su sistema operativo para ordenadores, donde no tiene prácticamente ningún interés económico.

Y la solución es bien sencilla: cada versión de Android debería establecer unos límites de qué hace y qué no hace el móvil. Las actualizaciones únicamente deberían corregir errores de programación. Como mucho podrían incluir alguna inofensiva floritura que no sacrifique el rendimiento del dispositivo, y que sea desactivable.

Al iOS de Apple ya no lo menciono porque a esa empresa ya le va de maravilla que sus clientes quieran estar a la última y se gasten fortunas en cada compra de un terminal que dejará de funcionar a causa de las actualizaciones de software: fascinante.

Pantalla: bien grande, que se rompa pronto. Por eso no me vuelvo a comprar un móvil con una pantalla de más grande de 4,5 pulgadas. Si no puedo agacharme teniendo el móvil en el bolsillo del pantalón, no es un móvil. Punto.

Y es que el asunto de las actualizaciones tiene miga. Una tomadura de pelo de tal calibre sólo se produjo con el cártel de los fabricantes de bombillas, en que se pusieron de acuerdo para que se estropeasen al cabo de un numero determinado se horas, obligando al consumidor a comprar otra, cuando era perfectamente posible fabricarlas más duraderas.

Como esta el planeta, debería ser delito grave el fomento del consumo al tun-tun, la obsolescencia programada, el crecimiento económico sin otro fin que el consumo por el consumo.

Yo voy a tardar mucho tiempo en comprarme ningún otro dispositivo móvil. Palabrita.