El Reino Unido está negociando su "salida" de la Unión Europea, pero parece que no quiere salirse mucho.
Los británicos, después de decidir irse azuzados por sus políticos, ahora parece que no quieren irse del todo.
Uno de esos políticos, Boris Johnson, ha dimitido. Perfecta definición del Capitán Araña: embarca todos los británicos en el brexit y luego se queda en tierra con un "si no es como yo digo, me bajo".
Pero, hay que tener en cuenta que Theresa May está intentando irse sin irse. Y Boris tiene principios. Y Theresa ve venir lo que va a ser estar fuera de la Unión Europea.
Al fin y al cabo parece que no era tan buena idea salirse de la Unión Europea.
Pero también claro, los británicos tienen fama de tener poca palabra, de moverse grácilmentre entre dos aguas: que si me voy, que si ahora no, ahora sí, bueno solo un poco. Hasta que topan con quienes eso no funciona y hay que tomar una decisión y posicionarse.
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