Cuidadito con Change.org

Si eres una persona precavida probablemente revises periódicamente qué sabe Google de ti, a pesar de haber controlado dónde enviabas tus datos personales. Si aún no te has buscado nunca, es posible que te lleves una sorpresa, una desagradable sorpresa.


Páginas web con un fin tan loable como la difusión de causas justas y la recopilación de firmas en su apoyo, como por ejemplo Change.org no te preguntan si quieres que publiquen tus datos en Internet. Lo hacen y punto. Y si no te gusta los puedes quitar, pero de momento y hasta que te des cuenta, ahí están, a la vista de todos. En todas las causas por las que firmaste, ahí está tu nombre, tus apellidos, tu dirección y hasta tu código postal. Y muy problemente no quieras que cualquiera pueda ver qué apoyas o dejas de apoyar.
Muy mal por Change.org.

Para colmo, si después de cerrar tu cuenta en Change.org decides que quieres hacerles saber a sus propietarios tu malestar por su falta de ética, te encontrarás con una amable e inútil página de "Preguntas frecuentes" en la que es imposible enviarles ningún correo o comentario.
Eso sí, en el pie de esa página pone "Sistema de tickets de soporte por Zendesk", lo que te deja con el mismo malestar pero con cara de idiota por saber que hay una empresa dedicada a atender los CERO tickets de soporte que pueden crear los usuarios de Change.org.
Change.org es todo un ejemplo de gestión nefasta del soporte a usuarios, aderezada con foto de gente sonriente.

De hecho en el segundo párrafo de su política de privacidad especifican que tu información no se compratirá con terceros. Vaya uno a saber qué entienden ellos por terceros, pero cualquiera con dos dedos de frente sabe que "tercero" es cualquiera que no sea tú (Change.org) y yo. Pero para esta gente el resto del mundo no son "terceros".



Otro ejemplo de este tipo de empresas es la propietaria de la aplicación para móviles "Repara Ciudad". Desde esta aplicación puedes enviar desperfectos o averías que quieras comunicar a tu ayuntamiendo o al organismo encargado de la gestión de lo que no funcione. Esta aplicción redirige tu queja al sitio más adecuado.

La gente de esta aplicación para móviles también publica en Internet todas las incidencias que has enviado de cosas que no funcionan en tu ciudad. Y para más pitorreo hasta te ponen medallitas como la del más concienciado o la del que primero se quejó de algo.

El resultado es el mismo: tus datos al descubierto en Internet y accesibles por cualquiera.
Eso sí, cuando les pides que no los publiquen al menos te responden y atienden a razones después de mencionarles la Ley de Protección de Datos española.

Quizás ahora es un buen momento para que busques qué sabe Google de ti.