Quizás alguien ya se haya encontrado que quiere plantar unas semillas pero cuesta que germinen, porque están recubiertas de una capa dura que las protege. Para facilitar su germinación se dice que se deben "escarificar", y en Internet, ese pozo sin fondo de información, llegan hasta a nombrar el ácido sulfúrico para hacerlo.
Claro que puedes usar ácido sulfúrico, si quieres escarificar dos toneladas de semillas, pero si solo quieres plantar unas pocas hay otras formas más sencillas, fáciles y al alcance de cualquiera.
Si las semillas son pequeñas puedes utilizar una lima de uñas para rasparlas en un punto para que al ponerlas luego en remojo absorban el agua más fácilmente. Así de sencillo.
24 horas en remojo y la maceta.
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