Y los últimos en meter la pata son los militares con sus pulseras de deporte.
Ciertos lugares, como las bases militares secretas, no aparecen en Google Maps más que como un manchorrón por motivos evidentes.
Pero resulta que hay militares que se sienten muy a gusto compartiendo públicamente en Strava sus rutas de deporte, lo que deja un bonito trazado de precisamente estas bases.
Qué bonito es compartir.