No cabe duda que la imagen de una buena parte de los policías ha quedado seriamente manchada después de las actuaciones de los antidisturbios, tanto de la Policía Nacional como de policías autonómicos, contra las manifestaciones ciudadanas, la inmensa mayoría pacíficas pero indignadas. Actuaciones exageradas y pretendidamente excusadas por las órdenes de políticos que las dictaron. Se les debería caer la cara de vergüenza a unos y otros, pero ahí están tan ricamente en sus puestos y sin ninguna consecuencia: ya conocemos cómo terminan las "investiagaciones internas" de Ignacio Cosidó.
El programa que presenta La Sexta muestra la parte policíal más agradecida por todos, la que combate delicuentes, no manifestaciones pacíficas de ciudadanos. Pero cuidado, no confundamos estos policías con aquellos otros de las manifestaciones. No son lo mismo. Unos se merecen el cielo y los otros en cambio... la justicia que no se les ha aplicado.
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