
Siguiendo con la absurdidad de la interpretación actual del copyright hoy expongo un caso evidente en el que un autor se atribuye derechos, de autoría y copyright, que, en mi humilde opinión, muy dudosamente puede atribuirse, pero que lo hace tan alegremente.
Se trata de la web
http://tones.wolfram.com (de la compañía
Wolfram Research), en la que pueden crearse piezas musicales de forma atumática y basadas en una serie de parámetros como por ejemplo el estilo musical, la velocidad o los instrumentos.