Una vez más han pillado a una empresa haciendo de Dios y pasándose las leyes y su propia política por la entrepierna: Google ha estado recopilando información de la ubicación de móviles con Android, incluso aunque lo hubieras desactivado.
Lo de Google, para colmo, contradice su lema "Don't be evil" ("No seas malvado"), su obligatoria política en Android de no recopilar información de los usuarios sin su permiso y que los publicadores de aplicaciones dejen clara su política de privacidad de datos.
Lo que me hace llorar de risa no es la excusa que ha dado Google para justificar el hecho, si no que hayan dado una excusa.
Google establece unas normas que se saltan ellos mismos a la torera. ¿Y pelillos a la mar?
Google ha hecho muchísimas cosas bien pero comienza a hacer algunas terriblemente mal.