Antes de nada, quiero advertir que soy una persona bastante normal.
Hoy he tenido un día ajetreado y no sé si es por eso pero me he encontrado con varios genios.
El primero, un albañil: en toda una pared, excepto en dos filas de azulejos, ha puesto azulejos de otro tono de blanco.
Le podría pasar a cualquier, pero bueno.
Segundo, en IKEA: les pregunto a una dependienta si tienen una lámpara con el globo más grande "que esta" y me señala otra del mismo tamaño. No debió ver el capítulo"Grande. Pequeño" de Barrio Sésamo.
Tercero, Leroy Merlín y las lámparas con LED integrado. Es decir, cuando se estropea la lámpara la tienes que tirar entera. Viva el consumo de usar y tirar.
Cuarto, Carrefour: entró con una bolsa de IKEA con lámparas de IKEA y la chica de la entrada me dice que, como no puede precintarla entera, pero precintará cada objeto. Le hago observar que todo son productos de IKEA y me dice que son las normas. Le indico que no creo que ellos vendan productos de IKEA y finalmente me deja pasar, no muy convencida.
Y así está el mundo.
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