El País perdiendo el norte a pasos largos

El diario El País me parecía una publicación más neutral que el resto. No todo lo neutral que se puede ser al comunicar noticias pero sí más neutral que, por ejemplo, El Mundo o La Razón. Eso sin tenerle en cuenta que las fotografías que elijen de las personas en sus artículos y que no son de una ideología similar a la suya, están escogidas con la premisa "a ver en cuál sale peor".

A parte de esto, era el único diario que conocía que no incluía un horóscopo, algo que dice mucho de la seriedad y veracidad de una publicación. Es una lástima que ahora sí lo incluyan.

Pero a parte de todo esto, que no es poco, y a pesar de haber dejado de comprarlo porque no hay noticias nuevas (repiten la misma noticia cada día sin información nueva hasta hartarte), el colmo ha sido hoy al leer este artículo de su blog: "Papá Noel me ha echado una tableta, ¿qué hago?"

Cuando uno lee un periódico, o su blog, es porque quiere informarse de un tema que desconoce y acude a la fuente más fiable que sí conoce. Cuando uno mismo quiere informarse procura obtener las información de más de una fuente para detectar esos matices que hay entre ellas y así obtener una idea más objetiva. Pero cuando lee de una fuente un artículo como el de arriba, la fuente queda directamente descartada y pierde otro poco más esa confianza que se ganó en otros momentos con información que sí era veraz mientras otros publicaban ficción y mentiras. Y lo voy a argumentar.

Rosa Jiménez Cano, autora del artículo sobre qué instalar en un tablet, comienza incluyendo tanto a Apple como a Android, intentando ser plural. Hasta ahí, bien.

Después comienza su recorrido por los lectores de libros y tarda una frase en recomendar la aplicación de librería de Amazon cuando no es ni de lejos la mayor fuente de libros. Nuestra amiga Rosa se olvida, por ejemplo, de la Biblioteca Cervantes o del Proyecto Gutenbert, por mencionar dos fuentes bien gordas. Pero Rosa prefiere barrer para casa y, si puedes pagar, mejor, ¿verdad Rosa? Claro que en estas dos fuentes no vas a encontrar "El señor de los anillos", pero para eso sí está Amazon y otras tiendas tanto de libros digitales como en papel. Un punto menos, Rosa.

Sigue con el acceso a noticias y la caga de nuevo. Vuelve a barrer para adentro recomendando las aplicaciones propias de cada publicación (viva la estandarización) y se olvida de mencionar que prácticamente todas se pueden leer perfectamente desde un navegador de Internet. Aún así, insiste en aplicaciones como Google Currents olvidándose también de cualquier lector de de blogs como Google Reader. Otro punto menos, Rosa.

Continúa con las utilidades. Sólo se le ocurre mencionar despertadores y luego vuelve a la carga recomendando Dragon Dictation, aplicación que supuestamente teclea lo que le dices, pero que ni la mejor de las aplicaciones de este tipo es más rápida que teclear, ya ni comento la odisea en que se convierte corregir algo. Otro menos, Rosa.

Música: sólo se le ocurre Spotify, de pago, claro. Como si no hubieran otras formas de oir músíca en un tablet.

Y cómo no, termina con las redes sociales, que si no metes Facebook (donde están todos los exhibicionistas) y Twitter (donde están todos ansiosos por ser escuchados) no eres nadie y parece que no estás a la última.

Rosa, si esto fuese el carnet por puntos no volvías a conducir. Gracias por tu compendio de medias verdades y por abrirme los ojos. Desde hoy no volveré a leer una página de El País con los mismos ojos, si es que la leo.

Un beso.